Sus mantas y pinturas son impactantes, y aunque resonaron más en la época en que las diseñó no dejan de llamar la atención y a la reflexión. Esta chica de Harlem nacida en 1930, creció en el ambiente propicio para desarrollar sus habilidades artísticas.

Debido a la inquietud de buscar espacios para las mujeres artistas buscó un estilo propio, y lo encontró a través de diversas manifestaciones del arte como la pintura, la escultura, y el diseño de colchas o mantas que mostraban historias, con su firma características desarrollada de acuerdo a lo que conoció a través de sus estudios de arte y viajes.

Es fascinante como rescata las tradiciones familiares, reconociendo las mantas que hacía su tatarabuela en la época de la esclavitud, para posteriormente usar esta técnica como elemento para mostrar los conflictos políticos y las demandas civiles en los Estados Unidos durante varias décadas del siglo XX.

Usar la aguja, el hilo, e idear sus imágenes donde combina con distintas técnicas, y crea su propia forma de manifestación artística. En medio de los conflictos políticos y sociales de los que ha sido testigo, ha manifestado en favor del derecho de las mujeres a participar en diversos espacios culturales y artísticos, y se ha manifestado en contra del racismo.

Sus piezas puede observarlas a través de su página donde encontrarás una interesante muestra de Faith Ringgold.



Who's bad? 1988
Faith Ringgold