No quiero acostarme sin escribir la experiencia de este día. Cuando estudié acerca algunas técnicas de investigación recomendaban reconstruir la jornada en las anotaciones de campo antes de descansar. Ahora que estoy estudiando el funcionamiento del cerebro cuando aprendemos entiendo como después del sueño, muchos momentos del día se desvanecerán.

Quiero recordar el espacio iluminado, con enormes ventanales que nos invita a apreciar el bonito jardín que rodea el local. Sendas mesas de hermosa madera nos sirvieron de apoyo para intercambiar ideas, hablar de materiales, y técnicas.

Los hilos y agujas creadas por Tahia de @ideasvital ; la conversación e ideas artísticas de Maritza Góngora; la forma como Ivana Garrido de @conideinfinita nos invita sanar a través del arte; y la intervención de Eddy de Cacao Cultura con su necesidad de escuchar y comunicar lo que se expresa a través del tejido y realzar la importancia de los relatos compartidos de cada participante fue una combinación perfecta.

La artesanía textil se presenta de muchas formas, nos ayuda a comunicar, a sentir, a meditar, nos deja piezas utilitarias o solo de admiración. En el caso del crochet solo necesitamos dos puntos básicos para iniciar la travesía, y Mariela Bahri me hizo sentir muy orgullosa de tomar en sus manos el hilo y el crochet, leer el patrón para posteriormente reconocerlos en cada una de las piezas que tomó en sus manos, espero verla con mucha frecuencia para tener estas experiencias que nos ayudan a crecer en muchos sentidos.

Tuve la fortuna de moderar estas dos horas: personas que tejen; personas que no tejen; artistas con intención de combinar textiles y otros materiales; participantes que se encontraban como observadores de la actividad. Escucharlos a todos fue enriquecedor, reafirmo mis ideas, y avivo otros temas.

No puedo dejar fuera las deliciosas tazas de chocolate, una receta especial, puedo decir que es uno de esos sabores que se quedarán impregnados en la memoria, por el aroma, el sabor, y el momento. Siempre es un placer volver a Cacao Cultura. 


Obsequio de @IdeasVital